La reconocida creación del compositor francés Georges Bizet vuelve a representarse en el Colón después de más de diez años de ausencia de los escenarios. En esta ocasión, la pieza será acompañada por una novedosa propuesta gastronómica de índole temática inspirada en la historia de la gitana española que protagoniza la obra que lleva su nombre.
La ópera Carmen se estrenó en París, un 3 de marzo de 1875 , causando gran revuelo y escándalo en la escena cultural de Francia. Hoy, la misma pieza provocativa y voluptuosa, pudo disfrutarse del 12 al 23 de julio en el Teatro Colón con una variante innovadora: una velada que además propone degustar un menú de 4 pasos inspirado en la vida de Carmen, la protagonista de la célebre pieza.
Carmen cuya música fue compuesta por el compositor Georges Bizet y lleva libreto de Ludovic Halévy y Henri Meilhac, con base en la novela homónima del escritor, historiador y arqueólogo francés Prosper Mérimée , ofreció durante su puesta en escena en Argentina, una variante de índole gastronómica innovadora, nunca antes montada para este tipo de espectáculos en el Teatro Colón. Y lo más interesante, es que fue muy bien recibida y agotó todas las localidades a las horas de ser puesta a la venta.
La innovadora propuesta gastronómica durante estas jornadas, se desarrolló en el Pasaje de los Carruajes del Teatro Colón, que abrió la posibilidad al público de disfrutar un menú de cuatro pasos inspirado en la temática de la obra a cargo de la empresa Blue Catering del Grupo L, que contó con la concesión del establecimiento gastronómico.
El recorrido temático y gastronómico de Carmen
La ópera Carmen escandalizó al mundo cultural francés de su tiempo. La ópera-comique en cuatro actos puso de cabeza las convenciones sociales de la época que, por primera vez, se llevaban al escenario las costumbres del proletariado y de las clases populares del pueblo español sin maquillajes y sin ocultar sus aristas controvertidas:su desenfreno e inmoralidad. Por ello, la pieza de Bizet marcó un parteaguas en la historia del género y, hoy en día, se encuentra entre las más representadas del mundo.
El compositor francés supo mostrar su talento a la hora de representar musicalmente las emociones más profundas y el sufrimiento de sus personajes a través de una melodía intrépida y una orquestación sublime, que han sido aclamadas en todos los escenarios del mundo. La historia de la gitana sevillana que se desgrana en Carmen cautivó al público por su gran realismo, transparencia y veracidad de cada una de sus escenas como así también, la potencia de Carmen, el personaje principal.
Carmen era una mujer de espíritu libre, carácter fuerte y emociones intensas . Su fascinación estaba dada por una personalidad libre de prejuicios y ataduras que se hacen patentes cuando la protagonista seduce y enamora a Don José, un cabo inexperto que pierde la cabeza por la hermosa sevillana. Inspirado en la arrolladora e intrépida personalidad de la protagonista de la pieza , Grupo L ofreció un primer plato llamado “Gitanas” que trajó a la mesa el tradicional espíritu español con un espectacular gazpacho, una tortilla y crocante de masa filo con forma de cigarrillo acompañados para beber de un Bizet Spritz.
El desarrollo de la trama
La trama se dramatiza cuando Don José abandona a su pareja para unirse definitivamente a Carmen. Para ello, debe abandonar el ejército y convertirse en desertor y se une como miembro de una asociación de contrabandistas. Pero, ocurre que al poco tiempo de iniciado el romance, la protagonista fiel a su espíritu libre , lo deja para poner en el centro de su corazón al torero Escamillo.
En consonancia con este cuadro dramático, el segundo paso del menú llamado “Don José & Escamillo” presentó unas deliciosas croquetas elaboradas con el mejor jamón ibérico acompañadas para beber, del sabor intenso de un Luca Chardonnay que se propuso para expresar la virilidad de los dos hombres que debieron enfrentarse y luchar por el amor de Carmen.
Por otro lado, el conjunto de los personajes que integran la ópera son auténticos, genuinos, vitales y se entregan todos, a sus pasiones e impulsos sin medir las consecuencias que pueden desencadenar sus acciones. Esta nobleza y característica de índole rústica se vió reflejada en la propuesta del tercer paso del menú llamado “Cavalleria Rusticana”. Este plato invitó a probar una exquisita cazuela de mar y tierra junto a una copa de un sobrio Altaland.
Para finalizar, el menú se cerró con un postre inspirado en el hilo conductor de las emociones que recorren toda la pieza. “Pasión Sevillana” regaló a los comensales una delicia de sabor compuesta por una crema catalana con un popurrí de frutos rojos acompañada por el inigualable sabor de un Baileys, que para los encargados del menú, representó todo el amor dramático evocando al trágico desenlace de la pieza junto a una exquisita copa de un champagne Domaine Nico Brut Rosé.