Pasaje Echeverría: un nuevo polo gastronómico de cocina al paso en Belgrano

Apostados en una callecita peatonal debajo de la nueva estación del Ferrocarril Mitre y a metros del colorido Barrio Chino, se abre al público una variada oferta de locales de comida al paso que van desde pizza de masa madre y falafel  hasta el exótico ramen . 

Cuando uno llega a la calle Echeverría al 1600, la variedad de propuestas de locales de comidas y cafeterías al paso, tan apretadas unas de otras y lo mismo que concurridas, transforman a este espacio ubicado -literal- debajo de una moderna estación de tren- en una experiencia gastronómica y urbana diferente.

Un sitio que pasó con el tiempo de ser un callejón  abandonado y tenebroso a polo hipster de la ciudad de Buenos Aires. Donde en la actualidad , se ubica la seguidilla de locales , fue el recorrido de la calle lindante a la estación del Tren Mitre , Belgrano C , que hoy es conocida como pasaje Echeverría. Aquí,  los aromas se funden con la música y las charlas de la gente, que van  matizadas con el ruido de la  urbe en uno de sus puntos álgidos:  autos , motos, colectivos y el clásico ruido de estación de tren.  Todo este  conjunto, conforma la dinámica de un nuevo polo gastronómico de impronta y sabores eclécticos que vale la pena descubrir. 

En 2019, todo comenzó a cambiar para estos pocos metros marginales del barrio de Belgrano. El “milagro”ocurrió cuando el periodista Clemente Cancela y el ilustrador Sebastián Lahera  se animaron a realizar una apuesta  “jugada”,  y abrieron Pony Pizza. El local traía una  propuesta diferente en la materia: era una ventanita que expendía pizza: no había mesas, ni sillas, ni cubiertos, tan solo pizza al paso.  Aun así, la gente la disfrutaba  sentada en unos bancos de cemento apostados en la puerta. El sabor y el coraje del público , le ganaron por lejos  a la marginalidad de la ubicación – “debajo del puente”- y la idea funcionó convirtiendo a Pony en un lugar de culto. 

Una apuesta contagiosa

La apuesta exitosa de Pizza Pony, dio pie a que muchos se animaran a seguir tras sus pasos con la misma receta: “calidad mata lugar”.   Por ello, hoy esta calle ofrece variedad y calidad de sabores, motivo que la ha convertido en una de las salidas gastronómicas más interesantes de Buenos Aires .  Aquí  van algunas de sus propuestas imperdibles para venir y probarlas con carácter obligado. 

1- Morro

Dentro de las opciones para disfrutar al paso, no puede faltar nunca el café. Quien se animó a levantar la persiana aquí  y plantar bandera es Diego Chamorro,un reconocido DJ argentino a quien  la pandemia lo obligó a un stop obligado. De un día para el otro, tuvo que reinventarse y no dudó en lanzarse a crear este take away coffee y dice que “la pegó”.  Quien entiende, sabe que es por la alta calidad de la propuesta.   

Morro es el lugar que eligen los que prefieren una versión chill de esta “frenética”  e intensa cuadra. Abre muy temprano en la mañana –cuando todo en alrededor está cerrado- y su particular estética y lograda ambientación predisponen a bajar las revoluciones y disfrutar de una  vibra bien relajada.

El team gastronómico de Morro es un lujo: el café de especialidad es de la exclusiva marca Fuego Tostadores y la pastelería premium, de Violeta Sigal. Todo aquí es de calidad, realizado de forma artesanal y  sabroso ,  “Acá no hay  nada industrial”, explica Chamorro. El plus : una vez al mes hay show de música en vivo.

Martes a domingos. Horario de 10 a 20  IG: @morro.cafe

2- Bastardo

Bastardo, no es el único. Tiene un hermano más grande- en tamaño y en antigüedad- que funciona en el barrio de  Nunez desde hace cinco años.  

“Cuando se nos vino encima la Pandemia, desde esta sucursal hacíamos deliverys y a medida que se fue abriendo el escenario un poco, se nos ocurrió aprovechar los 20 metros de vereda  y sacarles jugo” cuenta Patricia Rojo, una de sus dueños. “Trabajábamos bien y el espacio con mesitas en la calle fue algo sensacional, funcionó como un local gigante y solo teníamos un pequeño espacio, pero nos jugamos con la propuesta. A la gente le gusta la calidad, entonces cuando encuentra algo bueno, sabroso y bien hecho, vuelven.  

El Street art que decora las paredes del local va de maravillas con la propuesta gastronómica , ya que aquí todo gira en torno a la comida  “callejera”:  pinchos, falafel, hamburguesas. Y para beber, la infaltable cerveza Patagonia o la opción más artesanal de  Hormiga Negra.

Los platos tienen una elaboración particular y novedosa que los saca de lo convencional y lo clásico. Por ejemplo aquí se puede  pollo frito con yogurt, cebolla,  menta y perejil, o un plato que no falla y deja el alma y el estómago contento: el sándwich de carne braseada con cebolla caramelizada, hongos, puré de ajos  y reducción de tinto, los hits del lugar.

Horario de martes a sábados 18 a 23. Datos de IG: @bastardo.ar